El comportamiento del coche era genial, hasta que comenzó el descontento ya que cuando llovía entraba agua en el interior del vehículo. Lo llevé a distintos talleres, donde me informarón que se debía a un problema con el sistema de climatización. Sin embargo el agua sigue entrando por algún sitio, probablemente por el mismo, lo que se constata facilmente por el olor a humedad dentro del coche, y como pueden suponer el descontento con SEAT es bastante considerable. Si es un problema del sistema de climatización es un problema de fabricación que SEAT no ha solucionado.